Una vez un hombre heredó un terreno fértil, tan fértil que cualquier semilla que cayera en él germinaría rapidamente. Varias semillas cayeron en el campo un día creciendo completamente porque a todas les brindó la atención y los cuidados que requerían, pero unas fueron de gran utilidad y otras no resultaron ser tan provechosas. Desde entonces comenzó a brindar mayor atención a las plantas que mejor les convenía y que lo alimentaban positivamente mientras que, a la que no, les dejaba de ocupar su tiempo en ellas quedando ahí en el olvido; forman parte del terreno pero como un recuerdo de algo que creció y que gracias a esa experiencia le permitirá identificar desde que comienzan a germinar, las plantas que inmediatamente debe descartar para no estropear más su terreno. Y así fue, como después de tantos años, de logros y fracasos que se convirtió en un cultivador equilibrado, feliz y sereno. Hazme saber si el mensaje te sirvió. #reflexiones #filosofia #zen #tao #frases #frasesinspiradoras
You've added this content to your favorites.
![](/img/profiles/userm_medium.jpg)
Post your comment
Load More